Cáncer de ovario

Descubrimos de la mano de la Sociedad Española de Oncología Médica, ¿qué es el cáncer de ovario?

¿Cómo es el ovario y cuáles son sus funciones?

El ovario es un órgano que se encuentra en la pelvis, con forma de almendra y una longitud, de entre 2 y 4 centímetros. Cada mujer tiene dos, situados a cada lado del útero.

Sus funciones son:

  • La producción del ovocito o gameto femenino. El ovario libera este ovocito, cada mes durante la ovulación, que viaja por la trompa, un pequeño conducto que comunica con el útero, hasta el útero. La secreción de hormonas femeninas.
  • El ovario es la fuente principal de las hormonas femeninas, estrógeno y progesterona. Están implicadas en procesos como la regulación del ciclo menstrual, el embarazo y el crecimiento de las mamas, entre otros.

En la menopausia los ovarios dejan de producir ovocitos y hormonas femeninas.


¿Qué es el cáncer de ovario y qué tipos hay?

El cáncer de ovario, como otros tumores malignos, se produce como consecuencia de una acumulación de alteraciones genéticas, que causa un crecimiento y proliferación de forma incontrolada de las células epiteliales, que son aquellas que ayudan a proteger los órganos. No obstante, sigue sin conocerse el mecanismo o mecanismos que produce dichas alteraciones.

Representa el 3% de los tumores en la mujer y es la cuarta causa de muerte por cáncer en mujeres tras el cáncer de pulmón, mama y colon.

Existen 3 tipos de cáncer de ovario:

  • Carcinoma epitelial: representa el 85-90% de los canceres de ovario.
  • Tumores de células germinales. Muy infrecuentes.
  • Tumores del estroma. Aún más infrecuentes.

¿Cómo de agresivo es el cáncer de ovario?

El cáncer epitelial es la principal causa de mortalidad por cáncer ginecológico. Esto se debe a que la mayoría de pacientes (70-80%) se diagnostica en una etapa avanzada de la enfermedad.

La elevada mortalidad del cáncer de ovario se explica por dos razones:

  • La ausencia de síntomas específicos al inicio, lo que motiva que la mayoría de pacientes se presente con enfermedad diseminada al diagnóstico (que es más difícil de curar).
  • La ausencia de métodos de detección precoz (screening) que sean eficaces y estén validadas.

¿A quiénes afecta el cáncer de ovario y a qué edad se manifiesta?

Esta enfermedad es más frecuente en países industrializados. En cuanto a la edad de presentación, el cáncer de ovario es una enfermedad se da principalmente en las mujeres postmenopáusicas, con la máxima incidencia entre los 50 y 75 años (la media está alrededor de los 63 años).


¿Cuáles son las causas del cáncer de ovario?

La causa del cáncer de ovario continúa sin conocerse, aunque varios estudios epidemiológicos han identificado algunos factores que podrían aumentar el riesgo de la enfermedad:

  • Dieta rica en grasa y la exposición al talco.
  • Factores hormonales y relacionados con la reproducción. Las mujeres que no han tenido hijos tienen mayor riesgo de desarrollar la enfermedad. En cambio, este riesgo disminuye en aquellas que han empleado anticonceptivos orales.

Cerca del 20% de los cánceres de ovario son hereditarios, asociados, en la mayoría de casos, a mutaciones de los genes BRCA 1 y BRCA 2. Estos genes forman parte del grupo de “genes supresores de tumores” y contienen la información para la producción de unas proteínas implicadas en la reparación del ADN y, por tanto, en el mantenimiento íntegro del genoma (la secuencia total del material genético que posee un organismo).

Parecen existir otros genes implicados, en mayor o menor grado, siendo considerado aún incierto el papel que tienen en el desarrollo del cáncer de ovario.

No todas las mujeres con estas mutaciones BRCA desarrollan cáncer de ovario o cáncer de mama. Aunque las pacientes portadoras de estas mutaciones tienen una mejor supervivencia, ya que se someten a controles más exhaustivos y pueden ser diagnosticadas en una fase más precoz de la enfermedad.


¿Qué síntomas tiene el cáncer de ovario o cómo se manifiesta?

Las etapas iniciales del cáncer de ovario suelen cursar sin síntomas o con síntomas muy leves que pasan desapercibidos.

El tumor puede crecer en la cavidad abdominal y diseminarse de manera silente, de manera que cuando “da la cara” ya suele estar diseminado. Incluso los primeros síntomas en las etapas avanzadas son habitualmente bastante vagos, en forma de molestias, por lo que es frecuente que sean ignorados o confundidos con procesos benignos como dispepsia (indigestión) o “gases”. El cáncer de ovario es por tanto difícil de diagnosticar de forma precoz y esta es la principal causa de su elevada mortalidad.

El cáncer de ovario suele cursar con síntomas vagos en etapas iniciales, diseminándose de manera silente.
El cáncer de ovario suele cursar con síntomas vagos en etapas iniciales

A medida que el tumor crece pueden comenzar a aparecer algunos síntomas como:

  • Pérdida de apetito.
  • Sensación de plenitud abdominal tras la comida.
  • Pérdida de peso.

En general, se suele producir ascitis (acumulación de líquido en el abdomen), que puede causar distensión de la cavidad abdominal. También se puede acumular líquido en la pleura, en torno a los pulmones, y producir dificultad para respirar o sensación de falta de aire.

Por otra parte, el crecimiento de una masa ovárica en la pelvis puede afectar a la vejiga y el recto, causando síntomas como disuria (dolor o molestia al orinar), diarrea o estreñimiento, y dolor abdominal o pélvico.

Los siguientes síntomas deben motivar una consulta al médico, especialmente sin son persistentes y/o inusuales:

  • Distensión abdominal progresiva.
  • Sensación de plenitud con la comida, incluso con pequeñas cantidades.
  • Molestias pélvicas y/o abdominales.
  • Molestias al orinar y/o hacer deposición.
  • Sangrado vaginal inapropiado.

¿Cómo se diagnostica?

Ante la sospecha de cáncer de ovario, lo primero que se debe realizar a la paciente es una evaluación general consistente en:

  • Una historia clínica completa y una exploración física minuciosa con exploración de la pelvis y exploración ginecológica realizada por un ginecólogo.
  • Análisis de sangre que incluya marcadores tumorales.
  • Exploraciones radiológicas: como TAC, PET-TAC o RMN.

¿Qué pronóstico tiene el cáncer de ovario?

El pronóstico del cáncer de ovario depende, principalmente, de dos factores: el estadio y el tumor residual tras la cirugía.

La supervivencia global del cáncer de ovario se aproxima al 50%, sin embargo, varía en función de ciertos factores, siendo el principal la extensión de la enfermedad al diagnóstico.

  • Estadio I: tumor limitado al ovario. 90%.
  • Estadio II: tumor extendido a órganos vecinos. 65-70%.
  • Estadio III y IV: tumor extendido a distancia. 20-30%.

¿Cómo se trata el cáncer de ovario?

El tratamiento del cáncer de ovario combina la cirugía con la extirpación quirúrgica de todo el tumor existente visible seguido de quimioterapia.

El tratamiento depende de varios factores y los más importantes son el grado de extensión de la enfermedad y la situación clínica de la paciente.

  • I. Tratamiento en los estadios iniciales: confirmado el cáncer de ovario, el cirujano continúa la intervención con el fin de completar la estadificación de la enfermedad para conocer con detalle si la enfermedad ha podido extenderse fuera del ovario. En la mayoría de pacientes con estadio I (tumor limitado a los ovarios), la cirugía consigue la curación de la enfermedad. Sin embargo, existe un 20-30% de pacientes que presentará recaída de la enfermedad y que, teóricamente, se pueden beneficiar de un tratamiento médico complementario a la cirugía.
  • II. Cirugía como tratamiento inicial en los estadios avanzados: el cirujano suele encontrar que el tumor se ha extendido fuera de los ovarios. En estos casos, además del procedimiento quirúrgico de los estadios iniciales (extirpación útero, extirpación útero y ovarios), debe intentarse extirpar todo el tumor visible existente en la cavidad abdominal, incluyendo, si es necesario, segmento intestinal, áreas hepáticas o de bazo. Esta cirugía (citorreductora) no siempre es posible, considerándose óptima sólo cuando no queda enfermedad residual. En estos casos, se consigue un aumento de la supervivencia.
  • III. Quimioterapia como tratamiento inicial en estadios avanzados (neoadyuvante): limitada a aquellos casos en los que el cirujano prevé la imposibilidad de obtener una cirugía óptima. Con ella se busca reducir el volumen del tumor para que el cirujano pueda conseguir una cirugía óptima.
  • IV. Qumioterapia adyuvante (tras la cirugía): hay dos opciones: el mismo tipo utilizado como neoadyuvante y la intraperitoneal (directamente en la cavidad abdominal a través de un catéter).

Nuevas opciones de tratamiento: recientemente, han aparecido nuevas formas de tratamiento, con importantes beneficios en la supervivencia, que se asocian a las ya mencionadas. Los antiangiogénicos, los inhibidores de PARP y la inmunoterapia ya forman parte del tratamiento habitual.

El 70% de las pacientes con cáncer de ovario se diagnostica en fase avanzada (estadios III y IV). A pesar de un adecuado tratamiento inicial y de la eficacia de los fármacos, un gran número de pacientes (entre el 50 y 90%) presenta recaídas. Para estos casos, también hay fármacos o una cirugía de “rescate”.

Fuentes

*Esta información en ningún momento sustituye la consulta o diagnóstico de un profesional médico o farmacéutico.