Ojo vago
De la mano de IMO Grupo Miranza conocemos qué es la ambliopía, también llamada “ojo vago”.
¿Qué es la ambliopía?
La ambliopía, conocida popularmente como “ojo vago”, es una patología que se origina en la infancia. Consiste en la baja visión de uno o ambos ojos y está causada por un desarrollo anormal de la vista.
Esta disminución de la agudeza visual afecta, aproximadamente, al 5 % de la población. En algunos casos, si no se trata a tiempo, puede llegar mantenerse en la edad adulta.
Cuando alguno de ellos se daña, aparecen diferentes problemas que causan en el paciente dolor y dificultades para caminar.
¿Cómo se detecta el ojo vago?
Es una enfermedad de la vista que, generalmente, no da síntomas evidentes. Por ello, puede pasar desapercibida para los niños y sus familiares.
No obstante, sí hay algunas señales de alerta que pueden indicarnos que tienen este problema:
- No identifican correctamente a los familiares en distancias largas.
- Se acercan mucho los objetos a la cara o tuercen el cuello para ver bien.
- Desvían el ojo.
Como la patología suele ser asintomática, se recomienda que los niños lleven a cabo revisiones periódicas en el oftalmólogo a partir de los 3 años, para detectar o descartar este y otros problemas visuales.
¿Qué provoca la ambliopía?
La ambliopía u ojo vago se da cuando un ojo no está “aprendiendo” en la edad de enseñanza (hasta los 8-9 años), momento en que está desarrollándose. En el ojo ambliope, el desarrollo de la agudeza visual, por distintas causas, no se produce correctamente.
Hay algunas patologías o defectos visuales que pueden interferir en el buen desarrollo visual en edad pediátrica. Los más habituales son los defectos refractivos, como la hipermetropía, el astigmatismo o la miopía.
Asimismo, también pueden estar relacionadas otras patologías, como el estrabismo, la ptosis palpebral (caída del párpado) o enfermedades de la retina.
¿Cómo se trata el ojo vago?
Existen dos opciones terapéuticas para la ambliopía u ojo vago:
Por un lado, la estimulación del uso del ojo vago, a través de parches oclusores o gotas dilatadoras.
Asimismo, también se puede tratar la causa del ojo vago. En el caso de un defectivo refractivo, se puede prescribir corrección óptica y en los de estrabismo o ptosis, recurrir a la cirugía.
Se estima que el 99 % de los casos detectados precozmente se tratan con éxito. Sin embargo, si no se detecta y trata a tiempo, el ojo puede perder hasta un 40 o un 50 % de visión. Y será irreversible en la edad adulta.
Fuentes
- Equipo médico de IMO Grupo Miranza.
*Esta información en ningún momento sustituye la consulta o diagnóstico de un profesional médico o farmacéutico.
